Actualmente, la industria del calzado emplea una gran cantidad de materiales en sus procesos de fabricación, a fin de cumplir con las exigencias que demandan cada una de las piezas y/o componentes del calzado. Entre esos materiales, un gran porcentaje son textiles y esos textiles son en su mayoría poliéster. La fibra del poliéster es una de las fibras sintéticas más versátiles e importantes, tiene una resistencia sobresaliente a las arrugas, mantiene su forma original y además es suave al tacto por lo que el consumidor lo encuentra agradable. Esta y otras cualidades hacen que el consumo de fibra de poliéster en el sector textil sea cada vez mayor.

Sin embargo, asociado a este creciente consumo de los poliésteres en la fabricación de calzado, se encuentra la alta generación de residuos que se produce de esos materiales. Los residuos consisten en recortes y rechazos de cada una de las partes que integran el producto, conteniendo bien poliéster aislado o bien mezclado con otros materiales. Hoy en día, las únicas alternativas de fin vida para este tipo de residuo son (1) el reciclado mecánico, dando lugar a productos de muy bajo valor añadido o (2) el vertedero, siendo esta última opción la más empleada.

Residuos textiles de poliéster Figura 1. Ejemplos de diversos tipos de residuos textiles de poliéster procedentes de la industria del calzado

En este contexto y a su vez, dando respuesta a las directrices marcadas por el Programa LIFE Implementing Circular Economy, se enmarca el Proyecto LIFE-ECOTEX.